El intendente de Allen, Marcelo Román, denunció graves hechos de violencia ocurridos en el marco del conflicto municipal con los gremios ATE, SOYEM y UPCN. Según relató, un grupo reducido de manifestantes irrumpió en el edificio municipal, generando destrozos y ataques hacia trabajadores.
“Esto no es una protesta pacífica, es violencia. Llegaron a atacar a mujeres y jóvenes empleados; incluso tomaron un extintor y lo usaron contra trabajadoras. Tiraron bengalas y bombas de humo, y varias personas quedaron con secuelas psicológicas”, advirtió Román.

El jefe comunal recordó además un episodio que lo consideró de extrema gravedad: “La semana pasada, una jueza de Faltas intentó apagar un fuego con un extintor y fue maltratada y corrida por integrantes de un gremio. Todo quedó registrado en un video que se viralizó.”
Román cuestionó lo que calificó como una contradicción en el discurso gremial: “Hay una gran hipocresía. Se habla de derechos y de no violencia hacia la mujer, pero después se termina maltratando a mujeres y trabajadores.”
El intendente insistió en que los hechos no responden a un reclamo laboral, sino a un intento de desestabilización política: “Pretenden que yo renuncie, es un golpe institucional contrario a lo que decidió la gente en las urnas. El 95% de los empleados cumple con su trabajo, pero un grupo reducido mantiene de rehenes a todos.”
Desde la Municipalidad confirmaron que se presentaron denuncias en la Justicia, con pruebas que identifican a los responsables de los hechos violentos. “Vamos a seguir gobernando y trabajando por la ciudad. Queremos diálogo, pero sin violencia ni agresiones”, concluyó Román.