Karina Arias, es vecina de Villa Rita y realizó varias denuncias por violencia de género.
Actualmente, se encuentra en la calle con sus dos hijas menores y sus cosas quedaron en la casa de su ex- pareja porque la policía junto al denunciado la sacaron del lugar en donde vivía.
Karina expresó «Los conflictos comenzaron con insultos y discusiones, me agarraba del cuello, tuvimos discusiones de todo tipo».
Cansada de los problemas, tomó la decisión de acercarse a la comisaria de la mujer para comentar la situación.
«Es una persona que vos le pregustas algo y niega todo. Él dice que yo me metí a la fuerza. Sale a la defensiva. Pero hay otra gente que lo ve todo. Su hermana dice que esta loco. Tengo testigos y mi amiga me acompaña, al igual que mis hijas».
Ante la actitud del hombre, la vecina comentó «Me acerque a la comisaria, hice la denuncia y me hicieron un cese. Yo comenté que no era mi casa que la intención mía era quedarme en la casa hasta que yo pueda solucionar lo mío. Supuestamente, lo habían notificado y no podía molestarme, hostigarme, amenazar y las cosas siguieron igual. Nos insulto y al otro día hice la denuncia y que cualquier reacción de él, tenia que llamar al móvil».
La reacción del hombre iba cambiando y la vecina aclaró «El llegaba de trabajar y nosotros nos metíamos a la pieza. Cuando él veía que las cosas estaban tranquila, algo tenia que hacer para buscar problemas. Le mostraba cosas a la piba que no tiene que ver. Un día fue y saco la puerta del baño. Me acerque a la comisaria y la persona que estaba de guardia dijo que lo dejara, pero yo no podía dejar que mis hijas se bañen y vayan al baño sin la puerta».
La policía no acompañó a la mujer «No me quisieron tomar la denuncia en la comisaria y que si pasaba a mayores, ahí iban a intervenir porque según la comisaria no pasaba a mayores y no podían hacer nada. Que cualquier cosa, llame a la policía y va el móvil. Puse una cortina en el baño y me dijo que va a sacar la cortina. Yo le dije que no use mi cocina y se empeoro todo. Empezó a sacar y a tirar todo. Que era su casa que iba a tirar todo, que me iba a sacar a la calle y empezó a tirarme todas las cosas»
El denunciado por violencia de género no solo le pego a la ex- pareja sino que a sus hijas que son menores «Me largo una piña, se mete mi hija de 15 años, le pego una piña en la cara. Se mete mi hija mas chica de 13 años. Cuando me pega una piña yo me caigo y le mete una mano a la nena. Me agarra del cuello a mi y a la nena mas chica. Tenia todo hinchado».
Karina contó con dolor «Le dio la cabeza contra la pared a la nena, me rompió la nariz y dije que hay que llamar al patrullero, pero no nos atendieron. Llamamos al 911 y preguntaron para que queríamos un patrullero, mi hija comentó que le estaban pegando a mi mama. Le dijimos manda un móvil y fíjate lo que esta pasando. Pero el muchacho llamó y vino enseguida el patrullero. Llegaron y no hicieron nada. Si yo sabia que la policía no iba hacer nada, lo hubiese molido a palos».
El denunciado se puso en papel de victima «La policía no hizo prácticamente nada y él empezó a llorar, diciendo que nosotras empezamos a romper las cosas. Que nos volvimos loca, que rompimos la moto. La policía se acercó y le mostré la denuncia. Pero, me entere que él también había hecho una denuncia y que yo no vivía ahí. Que fui a la casa y le rompí todo. Pero, yo vivo en ese domicilio y tengo una denuncia hace mas de un mes. Ellos, no leyeron el papel y me preguntaron que hacia ahí.»
La vecina agregó «Después de los golpes, fui a la guardia. Luego, a la comisaria y me tomaron la denuncia pero no pusieron que las nenas estaban golpeadas. Solo pusieron que ellas intervinieron en la pelea y que no hubo golpes y lesiones. En este momento, nosotras seguimos dando vueltas, fui al domicilio y la policía me niega a entrar. Pero yo me quedo en la calle y hace dos días que no puedo ir a la casa».