Hace unos días, se difundió en las redes sociales un video en donde una familia solicitó que destruyeran un gauchito gil que tenían en su casa y el pastor Raúl Díaz junto a otros miembros de la congregación se acercaron al lugar.
Raúl Díaz relató que, tras vivir situaciones de miedo en su casa, decidieron poner fin a las prácticas que asociaban a la idolatría
«Un día uno de ellos encontró una escoba haciendo la vertical en el pasillo de la casa. A partir de ahí, comenzaron a asistir a la iglesia y entendieron que debían dejar atrás esas prácticas”.
Con temor de hacerlo solos, pidieron ayuda al pastor y a miembros de la congregación para destruir el altar del Gauchito Gil que tenían dentro de su propiedad
“Les daba miedo romperlo, así que fuimos nosotros y lo destruimos porque es una ofensa a Dios. La vida de ellos cambió. Somos felices cuando la gente sale de la ignorancia, sea por la idolatría, por la droga o cualquier tipo de problema”, aseguró.